Mi rutina capilar “no poo”: cómo cuidar el pelo sin champús comerciales
- Sustainable Teacher
- 16 may 2021
- 3 Min. de lectura
Actualizado: 15 oct
En este artículo te cuento mi experiencia con el método no poo, un sistema de lavado capilar que prescinde de los champús convencionales y apuesta por productos naturales o caseros.
Aprovechando que me tocaba lavarme el pelo, aproveché para grabar mi rutina completa y explicaros cómo lo hago y por qué no volvería atrás.
Qué es el método “no poo”
El término no poo viene de un juego de palabras en inglés con no shampoo (sin champú).
La idea principal es que los champús comerciales contienen químicos agresivos que, lejos de cuidar el cabello, lo dañan poco a poco.
Por eso, el movimiento “no poo” propone reducir o eliminar completamente el uso de champús industriales y sustituirlos por alternativas más naturales, suaves y sostenibles.
Dentro de este método hay distintos niveles:
Personas que no usan ningún tipo de champú, lavándose con bicarbonato y vinagre (una opción que yo probé, pero no me funcionó: me dejaba el pelo seco y con olor a vinagre).
Y otras, entre las que me incluyo, que usan champús y acondicionadores naturales o sólidos, ya sean comprados o hechos en casa.
Llevo casi dos años siguiendo esta rutina y mi pelo ha cambiado por completo.
Por qué dejé los champús comerciales
Los champús tradicionales no son realmente “jabones”, sino detergentes químicos.
El problema es que estos detergentes eliminan toda la grasa natural del cuero cabelludo, provocando sequedad.
Después, usamos acondicionadores para “reponer” esa suavidad artificialmente.
Con el tiempo, esto genera un círculo vicioso:
El champú elimina toda la grasa natural.
El cuero cabelludo reacciona produciendo más grasa.
El pelo se ensucia antes.
Volvemos a lavarlo más a menudo.
Y así, sin darnos cuenta, lavamos en exceso un pelo que solo intenta equilibrarse.
En mi caso, mi piel, labios y cabello siempre han sido secos, así que no sufrí demasiado con la grasa.
Pero conozco mucha gente que sí.
Desde que cambié a champú y acondicionador sólidos naturales, mi pelo está más equilibrado, brillante y fuerte.
Mis productos “no poo”
Guardo todo en latitas de aluminio reutilizables, ideales para mantener los productos secos y ordenados.
1. Champú sólido casero
Lo hago yo misma con ingredientes naturales como manteca de karité y aceites vegetales.
Me queda solo una pastilla, así que pronto grabaré la receta completa para compartirla.
2. Acondicionador sólido natural
Antes lo hacía en casa, pero el último intento no me convenció (dejaba el pelo graso pero poco hidratado).
Así que probé uno artesanal hecho en Málaga, 100 % natural, y me encanta: hidrata igual que uno comercial pero sin químicos.
Mi rutina de lavado
Me lavo el pelo una vez a la semana, normalmente los viernes, para tenerlo limpio el fin de semana.
Al usar productos sin detergentes, el cuero cabelludo ya no produce grasa en exceso, así que no se ensucia rápido.
También he eliminado espumas y otros productos de peinado.
No sigo el curly hair method: mi pelo tiene su forma natural, a veces más liso, a veces más rizado, y prefiero dejarlo libre.
Paso a paso
Mascarilla mensual: una vez al mes aplico una mascarilla casera de hidratación profunda (la receta es de Silvia Beauty Care, la encontrarás en Instagram).
Me la dejo varias horas o incluso un día, según el tiempo que tenga.
Lavado con champú sólido:
Mojo la pastilla y el cabello.
La paso haciendo círculos por el cuero cabelludo y la melena.
No hace tanta espuma como un champú convencional, pero limpia igual.
Acondicionador sólido:
Repito el mismo proceso.
Lo dejo actuar unos minutos mientras me ducho.
Enjuague: retiro todo con agua tibia.
Secado:
En invierno uso secador (no me gusta quedarme con el pelo húmedo).
En verano lo dejo secar al aire.
Peinado:
Me peino después de la ducha, no dentro, y no tengo problemas de rotura.
Resultados
Desde que sigo el método no poo, mi pelo está:
Más suave y brillante.
Con menos frizz.
No se ensucia tan rápido.
Y no necesito tantos productos para mantenerlo bonito.
Además, me siento mejor sabiendo que uso productos sostenibles, sin envases plásticos y sin químicos dañinos para el agua ni para el cuero cabelludo.
En resumen
El método no poo no es una moda pasajera: es una forma más natural, consciente y sostenible de cuidar el cabello.
No necesitas dejar de lavarte el pelo, solo elegir productos que respeten su equilibrio natural.
Si te animas a probarlo, te recomiendo empezar poco a poco:
sustituye tu champú habitual por uno sólido o natural y observa cómo reacciona tu pelo durante unas semanas.
Y recuerda: cada cabello es diferente.
Lo importante es encontrar una rutina que te funcione a ti.
Cuéntame en los comentarios si has probado el método no poo, qué productos usas o si tienes dudas.
Y, por supuesto, nos vemos pronto.










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